Una de las cosas más difíciles de trabajar en nosotros mismos es aprender a detenernos para mirarnos y así descubrir cómo estamos y qué necesitamos o simplemente para acompañar nuestro mundo interno.
¿Cuándo fue la última vez que te diste tiempo para simplemente estar, con lo que sea que estás sintiendo, sin necesidad de que haya ocurrido algo en especial?.
Me gusta pensar en nuestro mundo interno como un amigo o amiga, que sólo se muestra y confía en abrirme sus secretos cuando me he ganado su respeto, cuando sabe que cuenta conmigo, que seré cuidadosa de la información que me comparte, cuando logra confiar en que estaré ahí independiente de que pueda a veces ponerse fea la cosa. Para ello, necesito mostrarle mi presencia e incondicionalidad, que soy capaz de escucharle, acompañarle y mirarle compasivamente. De igual forma, podré yo entonces contar con este amigo, que se transformará en un aliado para mi bienestar.
Es por esto que, conocer nuestro mundo interno, es un proceso continuo, que requiere práctica y sistematicidad, que implica ser capaz de cuestionarme amorosamente, ponerme límites asertivos y comprometerme con mi bienestar emocional y mental para poder contribuir a mi crecimiento personal.
¿Cómo poder hacer esto en un mundo donde todo ocurre tan deprisa?
Desde hace mucho tiempo que he buscado una estrategia que permita facilitar este proceso, generando instancias de reflexión, auto observación, práctica y desafío que puedan canalizar o mostrar un camino al que dirigir nuestra energía para profundizar en el conocernos más y acompañar nuestras necesidades de desarrollo. Así surge Bitácora Emocional.
Bitácora Emocional es un proyecto al que le he puesto muchísimo cariño a lo largo de este confinamiento, dedicando cada tiempo libre que he tenido para sacar adelante y que me ha mostrado lo difícil que puede llegar a ser detenernos a mirarnos cuando la vida apremia.
De ahí que el desarrollar cuadernos de trabajo enfocados a temáticas específicas de crecimiento personal, con ejercicios breves y concretos que poner en práctica, motivando la reflexión y auto observación me pareció una idea para comenzar a responder a la necesidad de generar alguna forma de trabajo cotidiano conmigo mism@.
Te invito a conocer Bitácora Emocional, para lo que puedes comenzar por sumarte al Desafío 30 días de Pausa Diaria o al Desafío 30 días de Gratitud en que, de manera gratuita, iré compartiendo un ejercicio diario para que puedas acompañarte mejor y conectar con tu bienestar.
También puedes descargar de manera gratuita un ebook con los ejercicios, para que puedas volver a utilizarlos cuando tú quieras o incluso descargarlos en tu tablet para poder ir completándolos desde ahí.
Te invito a conocer las Bitácoras disponibles a la fecha en este link, donde además podrás comprarlas en su formato impreso.
¿Te animas a dejarte acompañar en tu proceso de crecimiento personal?